«La doncella del lago» fue una de las películas clave del pasado FICX, donde recibió el Premio del Jurado Joven. Ahora, coincidiendo con la nueva edición del festival internacional asturiano, llega a la cartelera dispuesta a encontrar un hueco entre los corazones de sus espectadores. Tiene los mimbres para lograrlo.
En un momento histórico en el que proliferan los estudios genéticos para intentar conocer cuáles han sido nuestros orígenes o, al menos, los relativamente cercanos, «Los colores del tiempo» plantea una reunión entre treinta familiares que no se conocían, descendientes de una mujer que les ha dejado como herencia una casa cargada de secretos y recuerdos. ¿Cómo no aprovechar esa situación para conocerse un poco mejor entre algunos de ellos, pero también querer averiguar de dónde vienen y quién era esa misteriosa mujer que forma parte de sus antepasados?
¿Cómo es posible recordar aquello que no has vivido? Todo ser humano es fruto de sus circunstancias y éstas están profundamente marcadas por nuestro propio origen. Reconstruir ese pasado anterior a nuestra propia existencia y dibujar a aquellas personas que te han traído a este mundo, intentar conocerlas a través de los ojos de quienes estuvieron presentes en esa época, con el fin de descubrir también una parte íntima y oculta de nosotros mismos conlleva hacerlo a través de sus opiniones y prejuicios, de verdades rodeadas de mentiras piadosas y de secretos guardados con llave.
Cuando se dio a conocer la creación de una película juvenil de formato musical con canciones de los Hombres G ambientada en Valladolid, pocos pudieron augurar que ese film dirigido por David Serrano iba a alcanzar los dos millones de euros en taquilla, que sería uno de los sleeper de la temporada y que recibiría el beneplácito tanto del público como de la crítica especializada, pero eso fue lo que sucedió con «Voy a pasármelo bien», estrenada en 2022.
Tres años después llega su secuela, «Voy a pasármelo mejor», con las mismas manos detrás de su guion -David Serrano y Luz Cipriota- idénticos personajes y actores, pero cambio en la dirección, a cargo de la debutante Ana de Alva, y en las canciones, que esta vez incorporan a otros grupos populares de los años 80 y 90.
Antes de adentrarte en éste u otros análisis de los que proliferarán en los próximos días a raíz del estreno en cartelera de «Sirat. Trance en el desierto» debo advertir que la experiencia de visionado de esta película es mayor cuanto más grande es el desconocimiento que se tiene sobre la misma.
Si, por tanto, aún no la has visto y quieres saber simplemente si la recomiendo mi respuesta es sencilla y directa: tienes que ver esta cinta, es uno de esos escasos casos anuales de cine-evento en que no te puedes perder una película y has de suscitarte tu propia opinión al respecto. Además, deberías hacerlo en la sala con mejor pantalla y sonido posible. «Sirat» lo aprovecha al máximo.
Dicho esto, encomiendo a leer mi crítica al completo solo a aquellos que ya han visto la película. A continuación queda mi personal análisis.
Seis años ha tardado Belén Funes en estrenar su segundo largometraje de ficción, tras el éxito crítico de «La hija de un ladrón», que le supuso ganar el Goya a la mejor dirección novel.
La ópera prima de Gemma Blasco tras su laureado corto «Jauría» y su aventura experimental en «El zoo» solo podía ser una película bestial en fondo y forma, una de las obras más estimulantes que nos dejará este prometedor año para el cine español y el mejor vehículo posible para coronar a su protagonista, Ángela Cervantes, como una de las mejores actrices de su generación tras una interpretación capaz de dejar mudo al espectador. Tras su estreno mundial en el festival indie internacional South by Southwest (SXSW), forma parte de la Sección Oficial del Festival de Málaga.
El undécimo largometraje dirigido por Icíar Bollaín se estrenará en la cartelera española el 27 de septiembre, una semana después de su paso por la Sección Oficial del Festival de San Sebastián. Tras el éxito de público, crítica y premios cosechado con su anterior obra, «Maixabel», la directora madrileña ha elegido narrar los sucesos acaecidos a otra figura femenina española relativamente reciente para contar una historia que no merece ser olvidada.
Catorce años han transcurrido desde el debut cinematográfico como director de Jonás Trueba en aquella ya lejana «Todas las canciones hablan de mí» y catorce son también los años que Ale y Álex, la pareja protagonista de la octava película del madrileño, llevan juntos como relación antes de anunciar su separación. Es curiosa -y seguramente no sea casual- esta analogía porque «Volveréis» mezcla cine y realidad con más astucia que nunca, con el (des)amor como hilo conductor y la esperanza en un futuro más ilusionante, como carril aspiracional al que avanzar.
En la última jornada de la 68ª Seminci podréis leer las reseñas de “Juniper”, película de clausura, de “La tierra prometida” de los pases de la Academia de Cine Europeo, así como “Negu hurbilak”, “Animal” y “The feeling that the time for doing something has passed” de Punto de Encuentro.