Recital de Macarena Gómez, quien, dirigida por los debutantes Juanfer Andrés y Esteban Roel se convierte en la esencia de la película y sorprende a propios y extraños con una interpretación superlativa, capaz de elevar a la propia cinta haciéndola trascender, volviéndola recordable a largo plazo.
Reducir Musarañas a la impactante e implacable interpretación de su protagonista sería, pese a todo, injusto porque este film, producido por Álex de la Iglesia e indudablemente con cierto aroma a su propio sello, acierta desde su primer fotograma y consigue trasladarnos con maestría al claustrofóbico ambiente del Madrid de los años 50 y a la represión de la posguerra a través de muy pocos personajes y una sola ubicación, un piso que la agorafóbica Macarena Gómez es incapaz de abandonar.
Musarañas se mueve entre el terror y el thriller sin dejar de coquetear con la comedia negra y lo hace con tal habilidad que el espectador será capaz de sentir verdadera pena por su protagonista, auténtica repulsión por sus actos y a su vez, reírse con ella. Tal combinación exige de Macarena una vis cómica sobrenatural, siendo creíble también cuando resulta un alma atormentada y cuando debe dar pavor. Por vez primera su criticado histrionismo tiene sentido en determinadas partes del film, pero lo más importante es que sabe matizarlo y contenerse cuando ha de hacerlo y es por ello que su interpretación puede considerarse una de las más destacables de este año.
A Macarena le acompañan una más que solvente Nadia de Santiago, una suerte de Lulú colorida, alegre y juvenil que supone una esperanza en un mundo gris que la reprime, un cada vez más efectivo Hugo Silva muy correcto en su papel de misterioso y atractivo vecino que es atrapado en la tela de araña, pero, sobre todo un descomunal Luis Tosar que, pese a que nadie sorprende ya su talla como actor, vuelve a sorprender por su eficacia como el padre opresor que destruye a Macarena y la persigue a través de prejuicios y remordimientos.
La atmósfera de Musarañas y las interpretaciones de su elenco son tan sobresalientes que resulta una verdadera lástima tener que frenar las loas y alabanzas cuando toca centrarse en otros aspectos de la película, especialmente en un guión que si bien funciona también es ciertamente poco original y tremendamente previsible, dos errores de bulto que lastran las aspiraciones de una película entretenidísima que finalmente debe a la interpretación de su protagonista la notoriedad que de otro modo no habría logrado alcanzar.
Valoración: 6 / 10