
En el sexto día de la 67ª Seminci he asistido al estreno de «The quiet girl», «Beautiful beings» y «El caftán azul» de la Sección Oficial.
SECCIÓN OFICIAL

The Quiet Girl – Colm Bairéad – Irlanda
Tras su paso por la Berlinale -en la sección Kplus- donde ganó el premio a la mejor película y después de ser elegida por Irlanda como su representante en la categoría de «mejor película internacional» para los próximos Óscar, «The quiet girl» también tiene su hueco en la Sección Oficial de la 67ª Seminci.

En «The quiet girl», una niña de nueve años vive en el seno de una familia disfuncional, excesivamente numerosa, y en la que nadie cuenta con ella para nada. Cuando se acerca el parto de un nuevo hijo, sus padres la envían a vivir con unos parientes lejanos que, en realidad, son unos desconocidos para ella. Allí, la niña descubre lo que significan los cuidados y afectos que debería haber recibido con anterioridad y también el valor del silencio cuando no se tiene nada bueno que decir. Sin embargo, allí descubre una dolorosa verdad.
«The quiet girl» es una película tan convencional que resulta cercana al telefilm o al concepto «película de tarde» pero está hecha con tanto mimo y resulta tan amable para el espectador que consigue ser conmovedora. Es una cinta muy fácil de ver, pero también de olvidar, aunque sin duda encontrará su nicho de público y no se debe desdeñar, igual que lo lograron cintas como «Criadas y señoras», por ejemplo.
La película, pese a su sencillez, cumple en sus apartados técnicos, con una fotografía correcta e interpretativamente está a la altura, resulta verosímil y su pequeña protagonista enternecerá a los espectadores. En definitiva, se trata de una obra pequeña, modesta, pero con cierto encanto y que gustará al público.
Valoración Golden Cinema:

Beautiful Beings – Guðmundur Arnar Guðmundsson – Islandia
Seleccionada por Islandia como su candidata al Óscar a la mejor película internacional, «Beautiful Beings», que ahora puede verse dentro de la Sección Oficial de la 67ª Seminci, es una de las más firmes aspirantes a la nominación o incluso victoria.

En «Beautiful Beings», Addi, un chico cuya madre dice tener poderes extrasensoriales, acoge en su grupo de amigos a un chico que ha sido víctima de bullying. Inadaptados y explosivos, la agresividad del grupo es proporcional a la lealtad y amor que hay entre ellos. Cuando las situaciones se empiezan a complicar demasiado Addi comienza a tener visiones oníricas que le hacen tener un mal presagio.
Son muchos los aciertos de «Beautiful Beings», que la sitúan entre las películas a tener en cuenta en la categoría internacional de los Óscar. Es una historia que pone el foco en la violencia juvenil pero explica claramente la disfuncionalidad familiar que muchas veces es el germen de este tipo de caracteres y también muestra el cariño y lealtad que se establece entre el grupo. Los adolescentes tienen aristas, no son dibujados como entes sin personalidad que actúan sin sentido -como por ejemplo ocurre en «Nothing»- aunque no se justifiquen sus comportamientos.
La interpretación de todo el elenco joven de actores es muy veraz y resulta fácil sentir empatía hacia ellos y desear que les salgan las cosas bien, que cambie su oscura realidad. La película está muy bien narrada, su tensión va creciendo constantemente y nada de lo que ocurre es gratuito, incluso el devenir fantástico a partir de las visiones del protagonista, que es lo menos realista de la cinta, sirve para oxigenar un poco las cosas y también tiene importancia en la trama. La ambientación de la cinta también está muy conseguida y consigue mostrar las particularidades y diferencias de cada personaje y de sus entornos.
«Beautiful Beings» es mi película preferida de la Sección Oficial este año y otro peldaño por encima en la carrera del director islandés, que ya sorprendió con «Hearstone» hace escasos años.
Valoración Golden Cinema:

El caftán azul – Maryam Touzani – Marruecos
Tras su paso por la sección «Un certain regard» (una cierta mirada) del Festival de Cannes y ser seleccionada por Marruecos como la película que les representará en la categoría de mejor película internacional en los próximos Óscar, «El caftán azul» forma parte de la Sección Oficial de la 67ª Seminci.

En «El caftán azul» se cuenta la historia de un matrimonio que lleva muchos años regentando una tienda tradicional de caftanes. Él tiene relaciones homosexuales en la clandestinidad porque tiene reprimida esa parte de sí mismo, hasta que la llegada de un joven aprendiz a la tienda se lo pone más difícil. La pareja tendrán que apoyarse mutuamente y demostrar su amor incondicional para que tanto él como ella puedan enfrentarse a sus miedos.
No es frecuente que un país islámico se adentre tan abiertamente en el cine de temática queer y que lo haya hecho una directora ya reconocida, como Maryam Touzani, cuya anterior película -«Adam»- tuvo visibilidad internacional, y sea la película seleccionada por el país para los Óscar dice mucho de esta cinta y es bastante revolucionario dadas las circunstancias.
«El caftán azul» es, sobre todas las cosas, una película muy bonita. Triste, pero preciosa. Lo que narra es desgarrador pero se hace con tal elegancia y sutileza que consigue la complicidad del espectador con sus tres protagonistas y consigue que les comprendamos. El estilo sobrio y contenido de Maryam dota a la cinta de un ritmo adecuado, excepto en su tercio final donde se alarga un tanto innecesariamente, y de una gran credibilidad, algo en lo que también tiene mucho que ver el trío protagonista de actores, todos ellos fantásticos en sus respectivos papeles. Se trata de una cinta que rebosa sensibilidad y que perfectamente podría acabar en la terna final de nominados en los Óscar.
Valoración Golden Cinema: